La represalia es una palabra de uso común en los titulares modernos, en tiempos en que el mundo se hunde más en el conflicto, y las diferencias de ideales o intereses personales siempre se resuelven con violencia, tiempos en los que la codicia y la envidia y el egoísmo son los que mueven a los individuos y las corporaciones e incluso las naciones, a tomar atajos que siempre resultan en la violencia.
Todas las naciones del planeta están en la actualidad, de un modo u otro, sufriendo las consecuencias de un mundo caído, la guerra, la corrupción, la contaminación, las adicciones, el trafico, la perversión, el libertinaje, la lista es larga y horrenda, y seguirá creciendo más y más horrendamente hasta el final de los tiempos, el cual ya está cerca.
Cualquier noticia de represalia o amenaza de represalia es recibida por el mundo con un encogimiento de hombros como si esta se hubiese convertido en cosa común y corriente, y aun mientras las consecuencias de la represalia traen el sufrimiento y la desolación a muchos, y aun mientras aumenta la cifra de muertos y las victimas cicatrizadas, la vida continua en aceptación y falta de interés, como si esto fuera cosa normal, como si esto fuera algo con lo que podemos vivir.
Esta locura se ha convertido en patrón común en todos los niveles de la sociedad, tenemos en todo el mundo una guerra contra las drogas cada vez más violenta, una que ha sido convenientemente organizada para alimentar el hambre de dinero y poder de sus jugadores clave, y la cual a menudo le roba la vida a personas inocentes. Tenemos un incremento espiral de violencia vinculada a las gangas, la cual continúa destruyendo hogares y aun pueblos enteros en prácticamente todas las naciones del mundo occidental, tenemos criminales de cuello blanco vestidos de banqueros, los cuales saquean las arcas de las naciones mientras el mundo observa con asombro e incredulidad. Tenemos gobiernos legalmente establecidos los cuales se hacen cada vez más corruptos, cargados de ministros que solo buscan obtener ganancias financieras y poder para satisfacer sus enfermas ambiciones y excesivos egos. Tenemos naciones amenazando otras naciones mientras una mira a la otra con envidia o resentimiento o sencillamente odio. Tenemos recursos naturales siendo arrasados y violados y violentamente extirpados de los suelos, trayendo la consecuente devastación de las regiones afectadas. Tenemos en nuestras manos un mundo que ha perdido la razón, un mundo en descomposición que en algún momento llegara a su desaparición completa y tenemos una población mundial que esta viendo esta tormenta perfecta tomando forma y cuya actitud es, a quién le importa!
Lo que es verdaderamente triste de todo esto es que la organización que se supone debería estar contrarrestando esta guerra total contra planeta y sus habitantes, la única organización que se supone debería estar desplegando una pancarta contra los poderes establecidos en aras de la humanidad, la Iglesia de Jesucristo, ha adoptado las maneras del mundo y ha optado por vivir de acuerdo con sus reglas, empeñados en la gloria personal, el enriquecimiento personal, y las satisfacciones terrenales.
La iglesia en general ha dejado de lado el Evangelio de Jesucristo a cambio de las luces brillantes y de la vida mundana, y ha fabricado un evangelio cómodo que le permite tomar su propio camino en lugar del camino de Cristo.
Nosotros los evangélicos que aun hoy criticamos a los católicos por haber hecho su propio evangelio a expensas de la Biblia, hemos terminado creando cientos de nuevos evangelios que tienen poco o nada que ver con Cristo.
Mientras tanto, ese mundo exterior, el cual continua diciendo, a quién le importa, está mucho menos interesado aun, al estar viendo a la organización que representa a Dios dividida en millones de pedazos, peleándose como gatos salvajes, y tomando represalias los unos contra los otros por asuntos mundanos que tienen todo que ver con ambiciones egoístas y nada que ver con Cristo Jesús.
Veo con desdén cómo nuestros "Canales cristianos" se han convertido en canales de compra y venta, y los famosos tele-evangelistas se han tornado en comerciantes de baratijas.
Y el mundo sigue su curso hacia la autodestrucción, y las almas que pertenecen a Cristo están yéndose directo al infierno, y no estamos haciendo nada al respecto.
Sin embargo, Dios dijo a un Elías que se sentía derrotado "pero me reservo... siete mil cuyas rodillas no se inclinan a Baal..." (1 Reyes 19:18).
"Así también, en la actualidad aun queda un remanente escogido por gracia" (Romanos 11:5)
Y este remanente continuará su lucha por una Iglesia unida en Cristo, una iglesia verdadera del Evangelio de Jesús, la cual es motivada por la justicia de Dios, y por la verdad infalible de la Biblia, y cuyos objetivos son la restauración del cuerpo de Cristo y la salvación de las almas.
El mundo continuará su decadencia, se trata de un cumplimiento de la profecía, y vendrá el fin, según las escrituras, y cuando ese evento se lleve a cabo, estaremos en frente levantando en alto la bandera de Jesús y reclamando en su nombre las almas de los que optaron por no doblar las rodillas ante Baal, de aquellos que optaron por seguirlo fielmente a El, en lugar de seguir las cosas del mundo.
Que el Señor te guíe a mantenerte firme en tu fe, luchando siempre por la defensa del evangelio, y el uso de su palabra como arma de restauración en vez de represalia!
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario