Parado en el séptimo piso de un edificio enorme que alberga los controles y las operaciones de una compañía telefónica gigantesca, no pude dejar de mirar a mí alrededor y curiosear en la asombrosa cantidad de equipos electrónicos y los millones de metros de cables que se extienden por todo el lugar.
Y mientras miraba esta descomunal operación la cual es en realidad sólo una porción de los controles necesarios para el funcionamiento de todos los teléfonos que esta empresa maneja, no pude mas que reflexionar sobre lo que implica vivir en nuestra sociedad hoy en día.
Un poco más de un centenar de años atrás, si necesitabas hablar con alguien no podías hacer mas que ir a visitarlo, o en los casos de personas separadas por grandes distancias, se escribía una carta, la cual tardaría desde días hasta meses para llegar a la persona en el otro extremo, dependiendo de su ubicación.
Hoy en día si quiero ver a mí familia solo enciendo mi computadora y les llamo, y en un instante puedo hablar con cualquiera de ellos y verlos. De hecho la conversación de vídeo se ha convertido en la practica del día, y muchas empresas de comunicación ya están ofreciendo los servicios que nos permiten hablar con cualquier persona en el otro lado del mundo a través de nuestro televisor como si ambos estuviésemos sentados en la misma habitación.
Hace unos días adquirí un nuevo teléfono celular, y es el mismo aparato que tiene mi esposa, y mientras jugábamos con ellos en la noche nos dimos cuenta de que podemos hacer llamadas de vídeo, por lo cual nos pasamos un tiempo llamándonos el uno al otro sin ninguna razón en particular, solo por divertirnos con nuestros nuevos juguetes y vernos uno al otro mientras hablamos por teléfono.
Y todo esto es maravilloso, la tecnología nos ha traído más cerca, más cerca de nuestras familias y amigos y más cerca del mundo, he estado recientemente hablando con familiares y amigos a quienes no había visto en décadas, y me las arreglo para ministrar diariamente a varias personas en todas partes del mundo a través del Internet, gracias al poder de la tecnología. La barrera de la distancia se ha roto, la comunicación ha alcanzado logros enormes, y, si el Señor se tarda, yo todavía creo que seguirá creciendo hasta el punto de que cualquier persona pueda estar, literalmente, en la misma habitación en un instante con otra persona sentada al otro lado el planeta a través de imágenes holográficas virtuales.
Estos grandes avances en la tecnología han afectado a nuestros patrones de pensamiento, nuestras actitudes y nuestro comportamiento, a pesar de que no nos demos cuenta en el inicio. Pero, ¿cómo han afectado a nuestra identidad? Y lo más importante, ¿cómo han afectado al reino de Dios? ¿Y qué precio, si alguno, hemos de pagar por todos estos avances? ¿cuáles son las consecuencias?
Recuerdo que cuando era niño solía jugar teléfono con mis amigos uniendo dos latas con una cuerda, en ese tiempo nunca se me ocurrió que sería necesario dotar a varios edificios de gran tamaño con una infraestructura gigantesca y miles de aparatos electrónicos, y gastar muchos miles de millones de dólares en las operaciones, sólo para hablar a través de una cuerda.
A gran escala, hemos construido nuestra sociedad alrededor de la tecnología, y nos hemos convertido en esclavos de la utilidad y conveniencia que esta nos ofrece, especialmente la tecnología de la comunicación. Nos hemos convertido en dependientes de la tecnología a tal punto, que ya no somos capaces de hacer nada si no la tenemos a nuestro alrededor. Aun cuando nos vamos de vacaciones, o a un lugar de relajación, nos llevamos con nosotros el ordenador y el teléfono celular y muchos otros dispositivos los cuales han creado una cadena invisible a la que estamos atados.
Estos avances sin duda nos han permitido realizar muchas cosas positivas para la difusión del Evangelio, podemos hacer hoy, en un día, lo que llevó meses e incluso años para hacer hace apenas unas décadas.
Y muchas regiones que fueron inalcanzables hace sólo unos años están hoy en día conectadas y escuchan la palabra de Dios a través de la radio o la televisión o de muchos otros medios que no estaban disponibles entonces.
Sin embargo, esta tendencia ha causado una pérdida de la inocencia alrededor del Reino de Dios. La disponibilidad de tantos recursos tan rápidamente, ha desbordado el mundo y ha traído las normas morales del hombre a niveles peligrosos de descomposición. Este deterioro ha afectado poco a poco e inevitablemente, a los hermanos. Al igual que un virus, la influencia negativa de este reino de la ilusión ha penetrado en la iglesia, y por medio de un ataque constante a la voluntad del individuo, especialmente los jóvenes, los cuales están siendo continuamente bombardeados por insinuaciones sexuales y de codicia las cuales han causado cambios indeseables en la forma en la que muchas reuniones y organizaciones cristianas están haciendo lo que Dios les ha llamado a hacer.
Lo oímos en las radios lo vemos en la televisión, podemos olerlo en las calles, hay pancartas por todas partes anunciando una gran variedad de productos eróticos para hacernos hermosos, inteligentes, deseables, protegidos, eficaces. Libros, vídeos, música, Internet, todo lo que nos rodea hoy en día se está utilizando como un medio para influir la mente del individuo a través de la comunicación, un flujo constante de lodo que con la excusa de hacernos "modernos" nos ha hecho amorales, casi inhumanos
Y vemos con desdén cómo no sólo el mundo en general, pero nuestro mundo ha sido influenciado; cómo la iglesia de Jesucristo ha comprado en esta desfachatez. Encontramos nuestras congregaciones llenas de chicas con prendas de vestir que son tan reveladoras que es mejor que estuvieran desnudas, y jóvenes usando modas derogatorias que los hacen parecer retardados e irresponsables, nuestro vocabulario ha sido definitivamente destruido por las expresiones “Hip” las cuales denigran nuestros valores. Nuestras actividades de entretenimiento están cada vez menos relacionadas con la formación del carácter o el crecimiento en Cristo, estas tienden cada día más a ser más como el mundo y menos como el Reino de Dios.
Y cada día más de las nuevas generaciones están practicando un cristianismo que está lejos de ser cristiano.
La tecnología nos ha dado grandes ventajas, y muchas cosas positivas se han logrado a través de ella, pero Satanás nunca duerme, y ha ido lenta y sigilosamente metiendo en el cuerpo de Cristo a través de la tecnología una versión puramente engañosa del evangelio.
Sólo un ciego no lo vería. Y muchos me llamarán anticuado y algunos otros nombres por pensar de esta manera, sin embargo, la Biblia sigue siendo la única verdadera e infalible palabra del Dios vivo, y la Biblia habla claramente de estos temas.
La tecnología no es necesariamente la culpable de la desintegración de los tejidos morales del hombre, aunque, evidentemente ha acelerado su proceso, y con ello nos ha traído más cerca del final como es profetizado en la Biblia.
Satanás ha manipulado la tecnología para difundir el conocimiento y la práctica del mal, a tales extremos, que el mundo tolera y practica e incluso promueve la maldad y el pecado de manera casual.
Los hijos de Dios por el contrario han estado en su mayoría dormidos frente a esta revolución de la comunicación, y mientras el Señor nos llama a ser inocentes como palomas y astutos como serpientes (Mateo 10:16) y al mismo tiempo Él nos llama a ser sabios en el mundo de los necios, no hemos hecho uso de esa sabiduría dada por Dios la cual todos poseemos.
No es demasiado tarde, vamos a ser la sal del mundo. Y muchos dirán, soy demasiado insignificante como para hacer cualquier cosa. El Señor te respondería a eso, ningún hijo de Dios es insignificante, y cada pequeño esfuerzo añadido al total provocará una ola gigantesca, una explosión espiritual que conduzca a la reforma, a la restauración y al evangelismo en masas.
Todos tenemos dones, por lo cual, haz algo con los tuyos, las herramientas que necesitas están disponibles a todo tu alrededor, entonces, haz, habla, actúa, contribuye, se significativo para el Señor.
Él ya ha ganado la guerra para nosotros, así que vamos a ganar algunas batallas para él.
Rev. José Antonio Luna
Siervo de Cristo Jesús
viernes, 29 de octubre de 2010
jueves, 28 de octubre de 2010
La Hierva se Seca!
Confío en ti Señor, porque no tengo la capacidad de hacer esto, pero tu Santo Espíritu que habita en mi me guía de la manera más sorprendente, haciendo posible que yo pueda hace cosas las cuales nunca habría pensado poder hacer.
Una vez vi a un hombre sentado en la acera de una de las calles del mundo. Irónicamente, el Estaba leyendo una revista llamada Revista de Servicios Sociales, sin embargo, este hombre era indigente sin hogar, descuidado, abandonado a los estragos de la vida,
Yo no podía dejar de reflexionar sobre la parábola del hombre rico y Lázaro, la cual Jesús dijo, como está escrito en Lucas 16:19-31.
Esta parábola nos habla de una realidad con la que vivimos en el presente a extremos nunca pensado antes, pues nos enteramos de que menos del diez por ciento de la población del mundo posee más de el noventa y cinco por ciento de la riqueza del planeta Menos de un millar de personas son literalmente dueños de este planeta, mientras que casi quince por ciento de la población del planeta vive con menos de noventa centavos de dólar por día, es decir cerca de mil millones de personas que viven en un estado de pobreza más allá de la comprensión. Y hay más datos, sólo la mitad de un por ciento, así es, la mitad del uno por ciento de la población del mundo consume el sesenta por ciento de los alimentos del planeta. Sí, este dato es correcto, menos de 3 millones de personas se come el sesenta por ciento de los alimentos producidos en el planeta.
Pero no se detiene allí, del cuarenta por ciento restantes, solo un uno y medio por ciento le llega a los más pobres en el planeta, esto es cerca de dos mil millones de personas. Así es, 33 por ciento de la población del mundo vive en uno y medio por ciento de todos los alimentos producidos.
Hay hoy más de diez millones de niños, que no van a la escuela, ya sea porque no hay escuela o no tienen los medios. Y más de mil millones y medio de personas en el planeta no saben leer ni escribir.
Cerca de la mitad de la población del mundo no tiene acceso al agua potable, y de esos, más de mil millones de personas no tienen acceso a ningún tipo de agua y otro mil millones de personas tienen que caminar por lo menos un kilómetro para llegar a una fuente de agua.
Y aún hay más, más de dos millones de niños mueren cada año por enfermedades relacionadas con el agua,
Estos datos han sido extraídos de un informe del Banco Mundial, en el que podemos encontrar muchos más detalles horribles de la codicia y la maldad que se mueve el corazón del hombre.
Un último dato que quiero mencionar es que los alimentos producidos en el planeta cada año son más que suficiente para alimentar a cada hombre, mujer y niño todos los días con tres comidas equilibradas durante todo el año y todavía habría un superávit significativo. Y se necesitarían menos del uno por ciento de la riqueza del planeta para llevar una fuente de agua potable a todas las personas en el mundo.
Sin embargo, leemos en la revista Forbes de los ricos y famosos que se deleitan en la gloria dada al hombre por su codicia y su crueldad,
La Biblia dice en Isaías 40:6-8 Una voz dice: "Grita". Y yo dije: "¿Qué voy a gritar?"
"Todos los hombres son como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo. La hierba se seca y la flor se cae, porque el aliento del Señor sopla sobre ellas. Sin duda el pueblo es hierba. La hierba se seca y caen las flores, pero la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. "
Y eso es un misterio que nadie quiere enfrentar, pero el temor a una dura realidad en el infierno está latente en el corazón de cada hombre, tanto los ricos como los pobres, porque el Señor puso su palabra en nuestros corazones, para convencernos de nuestra maldad, y atraernos a Él, sin embargo el control que el Dios del dinero ejerce en el hombre lo mantiene ciego y sordo a la realidad de la oscuridad que le espera en el momento de la muerte, y todas las riquezas y todo el poder y toda la gloria lograda en esta vida no cuenta para nada cuando la verdad le golpee en la cara, pero para entonces ya será demasiado tarde, y cada momento de gloria en esta tierra será recordado con dolor y arrepentimiento mientras la condenación eterna lo abraza.
El hombre rico podía ver a Lázaro sentado con Abraham, y podía ver que este se deleitaba en la gloria del cielo, y el lamentaba cada momento que había despreciado a el enfermo sentado en la puerta de su casa, y le pidió a Abraham que envíe a Lázaro a mojar la punta de su dedo y ponerlo en su boca para poder tener un momento de alivio. Pero no hay retorno del infierno, no hay salida, y la eternidad es un tiempo muy largo.
Los pocos años de vida que Dios nos ha dado aquí en la tierra no son más que un instante de nuestra vida eterna, y una oportunidad para derrotar a la enfermedad de la maldad que nos esclaviza, y abrazar su llamado a una vida de verdad y redención, una vida la cual podría tener sus momentos desagradables en el presente, pero que está llena de la alegría y la paz que sólo viene con el conocimiento de Cristo.
Ya que invocan como Padre al que juzga con imparcialidad las obras de cada uno, vivan con temor reverente mientras sean peregrinos en este mundo. (1 Pedro 1:17)
Pues peregrinos es lo que somos, en un planeta que está en descomposición y con destino a la destrucción a manos de un ser que Dios puso en la tierra para cuidar de ella, y para ser fructífero. Sin embargo, antes que esto llegue a pasar, el Señor Jesucristo cumplirá su promesa de volver sobre las nubes con el sonido de las trompetas, y para recoger a los que son suyos antes de la restauración de todas las cosas y la obliteración de la maldad
La inminencia de esta realidad es algo que sólo puede ser visto y entendido por los elegidos, pero aún hay tiempo, mientras nos queda tiempo, entonces vallamos a predicar y testificar con poder y denuedo por el Señor, y oremos con afán, con agonía, para que el corazón del hombre se ablande y para que se aparte de sus malos caminos, y se arroje a los pies de Jesús.
Él es la propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros sino también por los pecados de todo el mundo. (1 Juan 2:2)
Las riquezas y la gloria pueden parecer una cosa dulce, pero al final son de la desgracia del hombre. Pues antes de que seamos carne, somos espíritu, y como la hierba, la carne va a morir, pero el espíritu perdurara por toda la eternidad, por lo cual hagamos la eternidad en el cielo nuestra realidad actual, vamos a venir a Cristo, y seamos salvos.
Rev. José Antonio Luna
Siervo de Cristo Jesús
Una vez vi a un hombre sentado en la acera de una de las calles del mundo. Irónicamente, el Estaba leyendo una revista llamada Revista de Servicios Sociales, sin embargo, este hombre era indigente sin hogar, descuidado, abandonado a los estragos de la vida,
Yo no podía dejar de reflexionar sobre la parábola del hombre rico y Lázaro, la cual Jesús dijo, como está escrito en Lucas 16:19-31.
Esta parábola nos habla de una realidad con la que vivimos en el presente a extremos nunca pensado antes, pues nos enteramos de que menos del diez por ciento de la población del mundo posee más de el noventa y cinco por ciento de la riqueza del planeta Menos de un millar de personas son literalmente dueños de este planeta, mientras que casi quince por ciento de la población del planeta vive con menos de noventa centavos de dólar por día, es decir cerca de mil millones de personas que viven en un estado de pobreza más allá de la comprensión. Y hay más datos, sólo la mitad de un por ciento, así es, la mitad del uno por ciento de la población del mundo consume el sesenta por ciento de los alimentos del planeta. Sí, este dato es correcto, menos de 3 millones de personas se come el sesenta por ciento de los alimentos producidos en el planeta.
Pero no se detiene allí, del cuarenta por ciento restantes, solo un uno y medio por ciento le llega a los más pobres en el planeta, esto es cerca de dos mil millones de personas. Así es, 33 por ciento de la población del mundo vive en uno y medio por ciento de todos los alimentos producidos.
Hay hoy más de diez millones de niños, que no van a la escuela, ya sea porque no hay escuela o no tienen los medios. Y más de mil millones y medio de personas en el planeta no saben leer ni escribir.
Cerca de la mitad de la población del mundo no tiene acceso al agua potable, y de esos, más de mil millones de personas no tienen acceso a ningún tipo de agua y otro mil millones de personas tienen que caminar por lo menos un kilómetro para llegar a una fuente de agua.
Y aún hay más, más de dos millones de niños mueren cada año por enfermedades relacionadas con el agua,
Estos datos han sido extraídos de un informe del Banco Mundial, en el que podemos encontrar muchos más detalles horribles de la codicia y la maldad que se mueve el corazón del hombre.
Un último dato que quiero mencionar es que los alimentos producidos en el planeta cada año son más que suficiente para alimentar a cada hombre, mujer y niño todos los días con tres comidas equilibradas durante todo el año y todavía habría un superávit significativo. Y se necesitarían menos del uno por ciento de la riqueza del planeta para llevar una fuente de agua potable a todas las personas en el mundo.
Sin embargo, leemos en la revista Forbes de los ricos y famosos que se deleitan en la gloria dada al hombre por su codicia y su crueldad,
La Biblia dice en Isaías 40:6-8 Una voz dice: "Grita". Y yo dije: "¿Qué voy a gritar?"
"Todos los hombres son como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo. La hierba se seca y la flor se cae, porque el aliento del Señor sopla sobre ellas. Sin duda el pueblo es hierba. La hierba se seca y caen las flores, pero la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. "
Y eso es un misterio que nadie quiere enfrentar, pero el temor a una dura realidad en el infierno está latente en el corazón de cada hombre, tanto los ricos como los pobres, porque el Señor puso su palabra en nuestros corazones, para convencernos de nuestra maldad, y atraernos a Él, sin embargo el control que el Dios del dinero ejerce en el hombre lo mantiene ciego y sordo a la realidad de la oscuridad que le espera en el momento de la muerte, y todas las riquezas y todo el poder y toda la gloria lograda en esta vida no cuenta para nada cuando la verdad le golpee en la cara, pero para entonces ya será demasiado tarde, y cada momento de gloria en esta tierra será recordado con dolor y arrepentimiento mientras la condenación eterna lo abraza.
El hombre rico podía ver a Lázaro sentado con Abraham, y podía ver que este se deleitaba en la gloria del cielo, y el lamentaba cada momento que había despreciado a el enfermo sentado en la puerta de su casa, y le pidió a Abraham que envíe a Lázaro a mojar la punta de su dedo y ponerlo en su boca para poder tener un momento de alivio. Pero no hay retorno del infierno, no hay salida, y la eternidad es un tiempo muy largo.
Los pocos años de vida que Dios nos ha dado aquí en la tierra no son más que un instante de nuestra vida eterna, y una oportunidad para derrotar a la enfermedad de la maldad que nos esclaviza, y abrazar su llamado a una vida de verdad y redención, una vida la cual podría tener sus momentos desagradables en el presente, pero que está llena de la alegría y la paz que sólo viene con el conocimiento de Cristo.
Ya que invocan como Padre al que juzga con imparcialidad las obras de cada uno, vivan con temor reverente mientras sean peregrinos en este mundo. (1 Pedro 1:17)
Pues peregrinos es lo que somos, en un planeta que está en descomposición y con destino a la destrucción a manos de un ser que Dios puso en la tierra para cuidar de ella, y para ser fructífero. Sin embargo, antes que esto llegue a pasar, el Señor Jesucristo cumplirá su promesa de volver sobre las nubes con el sonido de las trompetas, y para recoger a los que son suyos antes de la restauración de todas las cosas y la obliteración de la maldad
La inminencia de esta realidad es algo que sólo puede ser visto y entendido por los elegidos, pero aún hay tiempo, mientras nos queda tiempo, entonces vallamos a predicar y testificar con poder y denuedo por el Señor, y oremos con afán, con agonía, para que el corazón del hombre se ablande y para que se aparte de sus malos caminos, y se arroje a los pies de Jesús.
Él es la propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros sino también por los pecados de todo el mundo. (1 Juan 2:2)
Las riquezas y la gloria pueden parecer una cosa dulce, pero al final son de la desgracia del hombre. Pues antes de que seamos carne, somos espíritu, y como la hierba, la carne va a morir, pero el espíritu perdurara por toda la eternidad, por lo cual hagamos la eternidad en el cielo nuestra realidad actual, vamos a venir a Cristo, y seamos salvos.
Rev. José Antonio Luna
Siervo de Cristo Jesús
domingo, 24 de octubre de 2010
El Principio de la Sabiduria!
¿Cuántos de nosotros los occidentales han visto u oído las historias o las representaciones de la natividad de Jesús y la crucifixión? Puedo decir sin vacilación que todos nosotros las hemos visto o escuchado en un momento u otro.
¿Cuántos de nosotros hemos escuchado o leído algún tipo de refrán o una parábola o una historia extraída de la Biblia? Definitivamente puedo decir que todos hemos hecho eso.
De hecho la mayoría de nosotros usa o ha usado en el pasado el nombre de Dios y de Jesús en conversaciones rutinarias, y por diversas razones, a menudo para blasfemar o jurar, o en clamor al Todopoderoso por concesiones o favores.
Sin embargo, cuando se trata de reconocer el señorío de Jesucristo, todos nos quedamos cortos.
Muchos de nosotros evita el tema o lo rechaza, a menudo sintiéndonos ofendidos o incómodos, a menudo retirándonos, huyendo o escondiéndonos, a menudo incluso maldiciendo o tomando una actitud acusativa o agresiva, o simplemente negativa.
Esto es una paradoja interesante. Pues Incluso la mayoría de ateos tienen un conocimiento intelectual de que Jesucristo es el Señor, y prácticamente todo el mundo sabe que Jesús murió por los pecados del mundo, sin embargo, cuando se trata de afectar nuestra vida, o interferir en nuestros asuntos, casi siempre le bloqueamos. Establecemos actitudes defensivas y barreras las cuales él no es permitido penetrar.
En una encuesta callejera encontraríamos que la mayoría de la gente cree en el cielo y el infierno, y que todo el mundo entiende que debe ser bueno para ir al cielo, muchos están aún convencidos de que van a ir al cielo debido a su comportamiento, pero más a menudo, excepto para los cristianos nadie puede dar una respuesta directa a la pregunta: ¿cómo vamos al cielo?
La verdad es que hemos sido engañados en la creencia de que lo único que importa es la vida que vivimos en esta tierra, que debemos perseguir el éxito y la riqueza y vivir una vida de felicidad, llena de lujo y de comodidad y de ganancias y acumulaciones egocentrístas.
Nuestro establecimiento de objetivos se ha reducido a las cosas materiales que podemos lograr, a la cantidad de dinero que podemos acumular, a cómo llegar a ser bien conocidos o famosos. Y en la mayoría de los casos, el legado que esperamos dejar a nuestros herederos es la fortuna, la educación y el patrimonio.
Comúnmente nos preocupamos únicamente por lo que va a pasar con nuestra familia, con nuestros hijos, si morimos. Tenemos poca o ninguna preocupación por el más allá, y en muchos casos, cuando lo hacemos, tenemos una mezcla de ideas incoherentes que no se identifican con el hecho de que somos malos por naturaleza y la recompensa del mal es el castigo eterno.
Las miríadas de religiones que han invadido nuestra cultura occidental todas invocan una vida de bondad egoísta enfocada en ganar puntos para la otra vida, pues, como en la balanza de la justicia, mientras más peso ponemos en nuestra bandeja de bondad, más posibilidades tenemos que ir al cielo o de alcanzar el nirvana o de reencarnar en una persona mejor, o de obtener un harén y una abundancia de bendiciones en nuestra otra vida.
Nadie se detiene a pensar que si Dios existe, y si Él es un Dios perfecto, y si no hay pecado en Él, entonces Él no puede lidiar con el pecado, y, si vivimos en pecado, no importa que tanto bien hagamos, o la cantidad de dinero que demos, o a cuántas personas ayudemos, o las obras de caridad o filantropía. Si vivimos en pecado, sencillamente, no podemos llegar y no llegaremos a ningún lugar cercano a Dios cuando dejemos esta vida. Sólo la condenación y el sufrimiento en las llamas del infierno nos harán compañía durante toda la eternidad.
La cosa es que la vida que vivimos hoy es perecedera, y sin embargo la mayoría de nosotros vivimos como si la muerte fuese algo lejano, algo que nunca va a pasar o que le va a pasar a otra persona, o algo para preocuparse en nuestra vieja edad, sin embargo, nuestros cuerpos frágiles están expuestos a esta realidad continuamente.
Pues vivimos en un mundo defectuoso, totalmente contaminado y lleno de situaciones potencialmente peligrosas, los productos que consumimos, el medio ambiente que nos rodea, las fuerzas de la naturaleza, nuestro estilo de vida, todo dentro de nuestra esfera de acción es potencialmente mortal, y nuestro frágil cuerpo no puede manejar extremos muy bien, quienes llevan una vida saludable a menudo no se dan cuenta, pero es suficiente que vallamos a una unidad de urgencias de cualquier hospital, a menudo podemos allí ver lo que realmente somos, de que realmente estamos hechos, y que no podemos realmente predecir nuestro futuro. No tenemos absolutamente ningún control sobre nuestras vidas.
Para aquellos de ustedes que no están convencidos, le sugiero que tomen unos minutos para leer los obituarios en cualquier periódico, los cuales están llenos de pequeñas notas sobre personas que tenían grandes esperanzas y expectativas y sueños, estos están llenos de breves Eulogias sobre personas jóvenes y viejas, porque la muerte no tiene preferencia ni distinción de persona, y no tiene restricciones de edad o raza o religión o sexo.
Y cuando llega el final, nos guste o no, lo creamos o no, todos vamos a seguir viviendo una vida eterna, la cual dependerá plenamente de la vida que hemos vivido en la carne, y nuestro destino final no será determinado por un marcador o una balanza, sino por un solo hecho, lo malo que hemos hecho. Y no importa en absoluto si usted fuera un criminal endurecido o un mentiroso ocasional, un asesino de masas o alguien que engaña a su esposa, porque en el día del juicio todos los pecados son sólo eso, pecados, y toda persona pecadora será eternamente separada de Dios y de toda bondad, y de todo favor, y será enviada donde él o ella pertenece, al lago del fuego eterno.
Sin embargo, yo comencé esta nota hablando de la historia de la natividad y acerca de la crucifixión, las cuales ambos son parte común del folklore occidental y muy familiar para nosotros.
La Biblia nos dice en Proverbios 9:10 que el temor del Señor es el principio de la sabiduría y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.
Si hemos oído hablar de esa historia del nacimiento y la crucifixión y la resurrección de Cristo, entonces sabemos que los que vienen a Él nunca serán rechazados. Pues "de tal manera amó Dios al mundo que dio a su único hijo para que todo aquel que cree en Él no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvar al mundo a través de él. (Juan 3:16-17)
En otras palabras, al abrazar la fe en nuestro Señor Jesucristo, y venir a Él con un corazón arrepentido y pidiendo perdón por nuestros caminos de pecado, podemos ser salvos. Él puede ahorrarnos las preocupaciones acerca de a donde vamos cuando nuestras vidas en la carne se terminen. Pero más importante aun es que tenemos un legado extraordinario para dejar a nuestros hijos, que ellos puedan tener la vida eterna por medio de la fe en Jesucristo.
Sin embargo, hay una condición establecida en todo esto. No podemos pretender venir a nuestro señor Jesucristo en arrepentimiento y recibirlo como nuestro Señor y Salvador. No debemos pensar que podemos comprar nuestro camino al cielo diciéndole a Jesús: Señor, Te amo y voy a dedicar mi vida a ti, y luego continuar con nuestras vidas como si nada hubiese cambiado, porque los que realmente reciben a Jesús están constantemente siendo transformados por el Espíritu Santo en una nueva persona, pero los que se resisten a las directrices del Espíritu Santo no son verdaderamente de Dios, no son verdaderamente salvos, y no van a ir al cielo, pues la Biblia dice que aquellos que caen después de haber conocido el poder del Espíritu Santo, están crucificando a Jesús de nuevo, y no hay esperanza para ellos.
Si conoces a Jesús, pero Jesús no te conoce, es hora de que decidas realmente conocerlo. Ya sea que te llames cristiano o no, independientemente de tus creencias o religión o tradición, si has escuchado la historia de la natividad, y la historia de la crucifixión y la resurrección de Cristo, y si estas han tenido algún impacto en ti, o si deseas tener una imagen definida y clara de tu vida después de la vida y de las muchas recompensas que el Señor ofrece en esta vida para aquellos que verdaderamente le siguen, entonces es hora de que caigas sobre tus rodillas y te arrepientas de todos tus pecados del pasado y del presente y renuncies a ellos para siempre, y le pidas al Señor Jesucristo que se convierta en el amo de tus dominios y que te de la vida eterna a partir de hoy. E inmediatamente encuentra una Biblia y leerla todos los días, y ora a Dios por dirección y orientación. Y encuentra un grupo cristiano y únete a ellos.
Y si haces esto, el Señor te bendice con una bendición extraordinariamente poderosa e incomprensible en el mundo espiritual, la cual te traerá la paz y el entendimiento, mientras el Espíritu Santo se convierte en una parte de ti.
Que el amor infinito de Dios y de Su hijo Jesucristo te abrace y te de ternura y calor, sabiduría e inteligencia.
Rev. José Antonio Luna
Siervo de Cristo Jesús
¿Cuántos de nosotros hemos escuchado o leído algún tipo de refrán o una parábola o una historia extraída de la Biblia? Definitivamente puedo decir que todos hemos hecho eso.
De hecho la mayoría de nosotros usa o ha usado en el pasado el nombre de Dios y de Jesús en conversaciones rutinarias, y por diversas razones, a menudo para blasfemar o jurar, o en clamor al Todopoderoso por concesiones o favores.
Sin embargo, cuando se trata de reconocer el señorío de Jesucristo, todos nos quedamos cortos.
Muchos de nosotros evita el tema o lo rechaza, a menudo sintiéndonos ofendidos o incómodos, a menudo retirándonos, huyendo o escondiéndonos, a menudo incluso maldiciendo o tomando una actitud acusativa o agresiva, o simplemente negativa.
Esto es una paradoja interesante. Pues Incluso la mayoría de ateos tienen un conocimiento intelectual de que Jesucristo es el Señor, y prácticamente todo el mundo sabe que Jesús murió por los pecados del mundo, sin embargo, cuando se trata de afectar nuestra vida, o interferir en nuestros asuntos, casi siempre le bloqueamos. Establecemos actitudes defensivas y barreras las cuales él no es permitido penetrar.
En una encuesta callejera encontraríamos que la mayoría de la gente cree en el cielo y el infierno, y que todo el mundo entiende que debe ser bueno para ir al cielo, muchos están aún convencidos de que van a ir al cielo debido a su comportamiento, pero más a menudo, excepto para los cristianos nadie puede dar una respuesta directa a la pregunta: ¿cómo vamos al cielo?
La verdad es que hemos sido engañados en la creencia de que lo único que importa es la vida que vivimos en esta tierra, que debemos perseguir el éxito y la riqueza y vivir una vida de felicidad, llena de lujo y de comodidad y de ganancias y acumulaciones egocentrístas.
Nuestro establecimiento de objetivos se ha reducido a las cosas materiales que podemos lograr, a la cantidad de dinero que podemos acumular, a cómo llegar a ser bien conocidos o famosos. Y en la mayoría de los casos, el legado que esperamos dejar a nuestros herederos es la fortuna, la educación y el patrimonio.
Comúnmente nos preocupamos únicamente por lo que va a pasar con nuestra familia, con nuestros hijos, si morimos. Tenemos poca o ninguna preocupación por el más allá, y en muchos casos, cuando lo hacemos, tenemos una mezcla de ideas incoherentes que no se identifican con el hecho de que somos malos por naturaleza y la recompensa del mal es el castigo eterno.
Las miríadas de religiones que han invadido nuestra cultura occidental todas invocan una vida de bondad egoísta enfocada en ganar puntos para la otra vida, pues, como en la balanza de la justicia, mientras más peso ponemos en nuestra bandeja de bondad, más posibilidades tenemos que ir al cielo o de alcanzar el nirvana o de reencarnar en una persona mejor, o de obtener un harén y una abundancia de bendiciones en nuestra otra vida.
Nadie se detiene a pensar que si Dios existe, y si Él es un Dios perfecto, y si no hay pecado en Él, entonces Él no puede lidiar con el pecado, y, si vivimos en pecado, no importa que tanto bien hagamos, o la cantidad de dinero que demos, o a cuántas personas ayudemos, o las obras de caridad o filantropía. Si vivimos en pecado, sencillamente, no podemos llegar y no llegaremos a ningún lugar cercano a Dios cuando dejemos esta vida. Sólo la condenación y el sufrimiento en las llamas del infierno nos harán compañía durante toda la eternidad.
La cosa es que la vida que vivimos hoy es perecedera, y sin embargo la mayoría de nosotros vivimos como si la muerte fuese algo lejano, algo que nunca va a pasar o que le va a pasar a otra persona, o algo para preocuparse en nuestra vieja edad, sin embargo, nuestros cuerpos frágiles están expuestos a esta realidad continuamente.
Pues vivimos en un mundo defectuoso, totalmente contaminado y lleno de situaciones potencialmente peligrosas, los productos que consumimos, el medio ambiente que nos rodea, las fuerzas de la naturaleza, nuestro estilo de vida, todo dentro de nuestra esfera de acción es potencialmente mortal, y nuestro frágil cuerpo no puede manejar extremos muy bien, quienes llevan una vida saludable a menudo no se dan cuenta, pero es suficiente que vallamos a una unidad de urgencias de cualquier hospital, a menudo podemos allí ver lo que realmente somos, de que realmente estamos hechos, y que no podemos realmente predecir nuestro futuro. No tenemos absolutamente ningún control sobre nuestras vidas.
Para aquellos de ustedes que no están convencidos, le sugiero que tomen unos minutos para leer los obituarios en cualquier periódico, los cuales están llenos de pequeñas notas sobre personas que tenían grandes esperanzas y expectativas y sueños, estos están llenos de breves Eulogias sobre personas jóvenes y viejas, porque la muerte no tiene preferencia ni distinción de persona, y no tiene restricciones de edad o raza o religión o sexo.
Y cuando llega el final, nos guste o no, lo creamos o no, todos vamos a seguir viviendo una vida eterna, la cual dependerá plenamente de la vida que hemos vivido en la carne, y nuestro destino final no será determinado por un marcador o una balanza, sino por un solo hecho, lo malo que hemos hecho. Y no importa en absoluto si usted fuera un criminal endurecido o un mentiroso ocasional, un asesino de masas o alguien que engaña a su esposa, porque en el día del juicio todos los pecados son sólo eso, pecados, y toda persona pecadora será eternamente separada de Dios y de toda bondad, y de todo favor, y será enviada donde él o ella pertenece, al lago del fuego eterno.
Sin embargo, yo comencé esta nota hablando de la historia de la natividad y acerca de la crucifixión, las cuales ambos son parte común del folklore occidental y muy familiar para nosotros.
La Biblia nos dice en Proverbios 9:10 que el temor del Señor es el principio de la sabiduría y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.
Si hemos oído hablar de esa historia del nacimiento y la crucifixión y la resurrección de Cristo, entonces sabemos que los que vienen a Él nunca serán rechazados. Pues "de tal manera amó Dios al mundo que dio a su único hijo para que todo aquel que cree en Él no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvar al mundo a través de él. (Juan 3:16-17)
En otras palabras, al abrazar la fe en nuestro Señor Jesucristo, y venir a Él con un corazón arrepentido y pidiendo perdón por nuestros caminos de pecado, podemos ser salvos. Él puede ahorrarnos las preocupaciones acerca de a donde vamos cuando nuestras vidas en la carne se terminen. Pero más importante aun es que tenemos un legado extraordinario para dejar a nuestros hijos, que ellos puedan tener la vida eterna por medio de la fe en Jesucristo.
Sin embargo, hay una condición establecida en todo esto. No podemos pretender venir a nuestro señor Jesucristo en arrepentimiento y recibirlo como nuestro Señor y Salvador. No debemos pensar que podemos comprar nuestro camino al cielo diciéndole a Jesús: Señor, Te amo y voy a dedicar mi vida a ti, y luego continuar con nuestras vidas como si nada hubiese cambiado, porque los que realmente reciben a Jesús están constantemente siendo transformados por el Espíritu Santo en una nueva persona, pero los que se resisten a las directrices del Espíritu Santo no son verdaderamente de Dios, no son verdaderamente salvos, y no van a ir al cielo, pues la Biblia dice que aquellos que caen después de haber conocido el poder del Espíritu Santo, están crucificando a Jesús de nuevo, y no hay esperanza para ellos.
Si conoces a Jesús, pero Jesús no te conoce, es hora de que decidas realmente conocerlo. Ya sea que te llames cristiano o no, independientemente de tus creencias o religión o tradición, si has escuchado la historia de la natividad, y la historia de la crucifixión y la resurrección de Cristo, y si estas han tenido algún impacto en ti, o si deseas tener una imagen definida y clara de tu vida después de la vida y de las muchas recompensas que el Señor ofrece en esta vida para aquellos que verdaderamente le siguen, entonces es hora de que caigas sobre tus rodillas y te arrepientas de todos tus pecados del pasado y del presente y renuncies a ellos para siempre, y le pidas al Señor Jesucristo que se convierta en el amo de tus dominios y que te de la vida eterna a partir de hoy. E inmediatamente encuentra una Biblia y leerla todos los días, y ora a Dios por dirección y orientación. Y encuentra un grupo cristiano y únete a ellos.
Y si haces esto, el Señor te bendice con una bendición extraordinariamente poderosa e incomprensible en el mundo espiritual, la cual te traerá la paz y el entendimiento, mientras el Espíritu Santo se convierte en una parte de ti.
Que el amor infinito de Dios y de Su hijo Jesucristo te abrace y te de ternura y calor, sabiduría e inteligencia.
Rev. José Antonio Luna
Siervo de Cristo Jesús
domingo, 17 de octubre de 2010
Mientras los Ultimos Dias se Acercan!
Algo extraordinario me sucedió hace un par de noches. Llamé a la compañía telefónica porque decidí que no quería continuar utilizando una tarjeta de crédito para pagar por este servicio. En conversación con uno de los representantes de servicio al cliente, yo insistía en que quería utilizar una forma de pago diferente, me ofrecí a pagar con tarjeta de débito, con pago bancario automático, cheques posfechados, e incluso les dije que me podía enviar una factura y yo pagaría contra recibo. A cada uno de mis ofertas la persona en el otro lado el teléfono me dijo que no, simplemente me dijo que si no podía usar una tarjeta de crédito para pagar tendrían que cerrar mi cuenta. Suena loco ¿no es así? Sin embargo, esta empresa, de la cual he sido cliente durante 6 años, en los que nunca he tenido un retraso en el pago, nunca una queja, un montón de referencias, y una considerable factura mensual regular, debido a mi necesidad de llamar al extranjero con frecuencia, estaba dispuesta a alienarme. A mi entender he sido el tipo de cliente de cualquier empresa querría tener, con un récord perfecto, pero sin dudarlo me dijeron que la única manera de seguir siendo un cliente seria si continuaba haciendo mis pagos con una tarjeta de crédito.
Me imagino que muchos de ustedes ya están pensando en lo que pensé mientras escuchaba estas palabras. Yo estaba estupefacto, y pensé en Jesús y sus advertencias en la Biblia, y pensé en el libro de Apocalipsis y la marca de la bestia (Apocalipsis 13:16-17)
Y sé que puede sonar un poco exagerado, pero puedo ver como esta tendencia ocurrirá más a menudo cada día con el cambio en la industria bancaria hacia un medio más electrónico de transacción.
Sobraría decir que he tenido que sucumbir a sus requerimientos o hubiera perdido mi número de teléfono el cual es mi contacto de acceso a los pastores y organizaciones de todo el mundo. Y, por supuesto, estoy buscando una alternativa, pero creo que si encuentro una, no pasará mucho tiempo antes de tener que someterme al mismo tipo de demanda por parte de otra empresa.
Sin embargo esto no es todo. Porque aun hay más.
Todos podemos observar las presentes controversias en el cuerpo de Cristo, el torbellino en que se encuentra hoy día, algo impensable hace apenas veinte años. Cada día surgen doctrinas nuevas, nuevas denominaciones, nuevas sectas, las cuales surgen y son popularizadas, corrientes herejes la mayoría de ellas, y en flagrante violación del evangelio de Dios.
La forma más reciente de ataque de Satanás ha llegado en forma de la iglesia emergente, la cual está dirigida a los jóvenes y a los ingenuos, con su hermenéutica posmoderna simplemente enfocada en la deconstrucción de la exégesis de la Biblia.
¿Es esto radical o qué? Y los Jóvenes de quince a veinte cinco años están siendo enamorados y atraídos en manadas hacia esta oscura filosofía de mentiras, la cual utiliza la tecnología como una herramienta de motivación para atraer a una generación que se siente como en casa y familiar con ese lenguaje, y mucho más atraídos por ella que por el arreglo tradicional y la actitud pasiva de los métodos de la iglesia clásica.
La influencia de esta flexible y atractiva corriente es desconcertante, y los grupos emergentes están apareciendo incluso dentro de las iglesias tradicionales, muchas de las cuales lo ven como una manera de atraer a los jóvenes. y el peligro no está tanto en su doctrina como en su práctica, pues cada iglesia emergente naciente muestra una declaración de fe que puede parecer totalmente creíble e inofensiva, sin embargo, sus aplicaciones convierten la verdad del evangelio en una verdad parcial, una que ‘debe ajustarse a los pensamientos modernos’. "Que tendrán apariencia de piedad, pero negarán su poder. No tengas nada que ver con ellos. "(2 Timoteo 3:5)
Como seguidores de Cristo se supone que tenemos el Espíritu de discernimiento el cual nos permite ver a través de este tipo de engaño, sin embargo, muchos pastores y líderes de la iglesia están cayendo presa de estas tendencias torcidas. " porque se levantarán falsos cristos y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los escogidos.” (Mateo 24:24)
Sin embargo esto tampoco lo es todo.
Porque hay mucho más. Cualquiera que haya intentado leer las noticias detrás de las noticias ha oído hablar del grupo Bilderberg, un grupo de hombres poderosos jurados a guardar secreto, y los cuales están detrás de las decisiones que hicieron realidad la Unión Europea, se trata de un grupo que tiene el poder de decidir quién gobierna en qué país y cómo el equilibrio de la economía mundial es controlado.
Aquellos de ustedes que nunca han oído de este grupo pueden consultar en el Internet. Hay suficiente material allí para mantenerles leyendo por un tiempo y para ponerles los pelos de punta.
Este grupo esta, en esencia, en el control de los dominios de un grupo mucho más grande llamado el grupo trilateral, que se forma principalmente por estadistas, magnates empresariales y políticos de alto perfil del mundo, y el cual está trabajando activamente en la formación de un gobierno mundial .
Estas investigaciones nos muestran que el gobierno mundial es prácticamente ya un hecho, y la economía mundial ya se está en ciernes.
La presente nota no tiene la intención de expandir en los detalles de este tipo de información. Todo esto está disponible en el Internet para aquellos de ustedes que no están conscientes de ello. Todo lo que necesitas hacer es escribir grupo Bielderberg o grupo trilateral en cualquier fuente de búsqueda en la Web.
Pero todavía hay mucho más. No creo que tengamos que hablar de guerras y rumores de guerras. Esto lo vemos en las noticias todos los días, pero hay mucho más acontecimientos que los que se ven a simple vista en las noticias, nunca en la historia ha estado el mundo tan cerca de una guerra termonuclear como lo esta hoy día, sin embargo, para enterarnos de estas cosas tenemos que ir más allá de los medios de comunicación patrocinados y sancionados por el estado, pues estos tienen el propósito de mantenernos distraídos con los últimos chismes o eventos y acontecimientos mundiales.
No necesitamos hablar sobre las catástrofes mundiales, pues nos enteramos a diario de nuevos desastres en todo el mundo. Oímos hablar de volcanes en erupción por todas partes, los expertos no saben a qué atribuir esta cadena de eventos. Nunca ha habido tantos volcanes activos en toda la historia del mundo. La frecuencia de los terremotos en todo el globo terráqueo no tiene precedentes, y siguen creciendo en magnitud causando grandes daños donde quiera que se producen. También estamos familiarizados con las tormentas meteorológicas frecuentes que mantienen los grupos de ayuda y las organizaciones de socorro ocupados, pasando de una zona de desastre a otra, y muchos de ellos quedándose sin recursos.
Muchas personas religiosas dicen que Dios está enojado con nosotros; estos necesitan leer las Escrituras y darse cuenta de que todo es parte de la profecía. Estos acontecimientos están supuestos a suceder
Se ha hecho común el escuchar del hambre en el mundo, las hambrunas, las plagas, las enfermedades, las epidemias. Todo esto va a pasar con mayor rapidez cada vez, y la tendencia va a continuar hasta el final.
Jesucristo viene en las nubes para reunir a los elegidos (Mateo 24:30-31) (Apocalipsis 1:7). Y las Escrituras claramente anuncian todos los eventos que están teniendo lugar hoy día, y los cuales son los precursores de su venida.
Puede ser que Él se demore un poco mas en su venida, y es probable que algunos de nosotros no llegue a verlo aparecer en todo su poder en el cielo, pero el hecho de que la Biblia nos da una descripción clara y precisa de los acontecimientos que tan notablemente están teniendo lugar hoy día, muchos de cuyos eventos fueron profetizados hace más de tres mil años. Estos hechos por sí solos deberían ser suficientes para ponernos en alerta, y guiarnos a asegurarnos de que estamos preparados para la venida de Cristo Jesús. Pues sólo unos pocos serán recogidos.
Yo quiero ser uno de ellos, y seré uno de ellos, y quizás tú preguntes, ¿que me hace estar tan seguro?
Lo que me hace estar tan seguro es el hecho de que obedezco sus mandamientos, de que le sigo de cerca, que hablo con él varias veces al día y trato de serle fiel a Él y a su palabra, pero sobre todo, el hecho de que en mi imperfección Dios me ha hecho perfecto en Él.
Los esfuerzos que yo pueda hacer, no me ayudan, las obras que yo haya hecho para Él no me ayudan, las iglesias que he plantado, no me ayudan, las personas que han venido a él a través de mi labor tampoco me ayudan. Lo único que me da esa seguridad, es su gracia y el regalo de la salvación que él me dio cuando vine a él con un corazón arrepentido, y en lágrimas y sollozos clamé por su misericordia y su perdón, el día que di mi vida a Él y Él se convirtió en mi Señor y mi Salvador.
Haz lo que yo hice, y atrapa la seguridad de la vida eterna, en su gloria.
El tiempo apremia. Prepárate.
José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
Me imagino que muchos de ustedes ya están pensando en lo que pensé mientras escuchaba estas palabras. Yo estaba estupefacto, y pensé en Jesús y sus advertencias en la Biblia, y pensé en el libro de Apocalipsis y la marca de la bestia (Apocalipsis 13:16-17)
Y sé que puede sonar un poco exagerado, pero puedo ver como esta tendencia ocurrirá más a menudo cada día con el cambio en la industria bancaria hacia un medio más electrónico de transacción.
Sobraría decir que he tenido que sucumbir a sus requerimientos o hubiera perdido mi número de teléfono el cual es mi contacto de acceso a los pastores y organizaciones de todo el mundo. Y, por supuesto, estoy buscando una alternativa, pero creo que si encuentro una, no pasará mucho tiempo antes de tener que someterme al mismo tipo de demanda por parte de otra empresa.
Sin embargo esto no es todo. Porque aun hay más.
Todos podemos observar las presentes controversias en el cuerpo de Cristo, el torbellino en que se encuentra hoy día, algo impensable hace apenas veinte años. Cada día surgen doctrinas nuevas, nuevas denominaciones, nuevas sectas, las cuales surgen y son popularizadas, corrientes herejes la mayoría de ellas, y en flagrante violación del evangelio de Dios.
La forma más reciente de ataque de Satanás ha llegado en forma de la iglesia emergente, la cual está dirigida a los jóvenes y a los ingenuos, con su hermenéutica posmoderna simplemente enfocada en la deconstrucción de la exégesis de la Biblia.
¿Es esto radical o qué? Y los Jóvenes de quince a veinte cinco años están siendo enamorados y atraídos en manadas hacia esta oscura filosofía de mentiras, la cual utiliza la tecnología como una herramienta de motivación para atraer a una generación que se siente como en casa y familiar con ese lenguaje, y mucho más atraídos por ella que por el arreglo tradicional y la actitud pasiva de los métodos de la iglesia clásica.
La influencia de esta flexible y atractiva corriente es desconcertante, y los grupos emergentes están apareciendo incluso dentro de las iglesias tradicionales, muchas de las cuales lo ven como una manera de atraer a los jóvenes. y el peligro no está tanto en su doctrina como en su práctica, pues cada iglesia emergente naciente muestra una declaración de fe que puede parecer totalmente creíble e inofensiva, sin embargo, sus aplicaciones convierten la verdad del evangelio en una verdad parcial, una que ‘debe ajustarse a los pensamientos modernos’. "Que tendrán apariencia de piedad, pero negarán su poder. No tengas nada que ver con ellos. "(2 Timoteo 3:5)
Como seguidores de Cristo se supone que tenemos el Espíritu de discernimiento el cual nos permite ver a través de este tipo de engaño, sin embargo, muchos pastores y líderes de la iglesia están cayendo presa de estas tendencias torcidas. " porque se levantarán falsos cristos y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los escogidos.” (Mateo 24:24)
Sin embargo esto tampoco lo es todo.
Porque hay mucho más. Cualquiera que haya intentado leer las noticias detrás de las noticias ha oído hablar del grupo Bilderberg, un grupo de hombres poderosos jurados a guardar secreto, y los cuales están detrás de las decisiones que hicieron realidad la Unión Europea, se trata de un grupo que tiene el poder de decidir quién gobierna en qué país y cómo el equilibrio de la economía mundial es controlado.
Aquellos de ustedes que nunca han oído de este grupo pueden consultar en el Internet. Hay suficiente material allí para mantenerles leyendo por un tiempo y para ponerles los pelos de punta.
Este grupo esta, en esencia, en el control de los dominios de un grupo mucho más grande llamado el grupo trilateral, que se forma principalmente por estadistas, magnates empresariales y políticos de alto perfil del mundo, y el cual está trabajando activamente en la formación de un gobierno mundial .
Estas investigaciones nos muestran que el gobierno mundial es prácticamente ya un hecho, y la economía mundial ya se está en ciernes.
La presente nota no tiene la intención de expandir en los detalles de este tipo de información. Todo esto está disponible en el Internet para aquellos de ustedes que no están conscientes de ello. Todo lo que necesitas hacer es escribir grupo Bielderberg o grupo trilateral en cualquier fuente de búsqueda en la Web.
Pero todavía hay mucho más. No creo que tengamos que hablar de guerras y rumores de guerras. Esto lo vemos en las noticias todos los días, pero hay mucho más acontecimientos que los que se ven a simple vista en las noticias, nunca en la historia ha estado el mundo tan cerca de una guerra termonuclear como lo esta hoy día, sin embargo, para enterarnos de estas cosas tenemos que ir más allá de los medios de comunicación patrocinados y sancionados por el estado, pues estos tienen el propósito de mantenernos distraídos con los últimos chismes o eventos y acontecimientos mundiales.
No necesitamos hablar sobre las catástrofes mundiales, pues nos enteramos a diario de nuevos desastres en todo el mundo. Oímos hablar de volcanes en erupción por todas partes, los expertos no saben a qué atribuir esta cadena de eventos. Nunca ha habido tantos volcanes activos en toda la historia del mundo. La frecuencia de los terremotos en todo el globo terráqueo no tiene precedentes, y siguen creciendo en magnitud causando grandes daños donde quiera que se producen. También estamos familiarizados con las tormentas meteorológicas frecuentes que mantienen los grupos de ayuda y las organizaciones de socorro ocupados, pasando de una zona de desastre a otra, y muchos de ellos quedándose sin recursos.
Muchas personas religiosas dicen que Dios está enojado con nosotros; estos necesitan leer las Escrituras y darse cuenta de que todo es parte de la profecía. Estos acontecimientos están supuestos a suceder
Se ha hecho común el escuchar del hambre en el mundo, las hambrunas, las plagas, las enfermedades, las epidemias. Todo esto va a pasar con mayor rapidez cada vez, y la tendencia va a continuar hasta el final.
Jesucristo viene en las nubes para reunir a los elegidos (Mateo 24:30-31) (Apocalipsis 1:7). Y las Escrituras claramente anuncian todos los eventos que están teniendo lugar hoy día, y los cuales son los precursores de su venida.
Puede ser que Él se demore un poco mas en su venida, y es probable que algunos de nosotros no llegue a verlo aparecer en todo su poder en el cielo, pero el hecho de que la Biblia nos da una descripción clara y precisa de los acontecimientos que tan notablemente están teniendo lugar hoy día, muchos de cuyos eventos fueron profetizados hace más de tres mil años. Estos hechos por sí solos deberían ser suficientes para ponernos en alerta, y guiarnos a asegurarnos de que estamos preparados para la venida de Cristo Jesús. Pues sólo unos pocos serán recogidos.
Yo quiero ser uno de ellos, y seré uno de ellos, y quizás tú preguntes, ¿que me hace estar tan seguro?
Lo que me hace estar tan seguro es el hecho de que obedezco sus mandamientos, de que le sigo de cerca, que hablo con él varias veces al día y trato de serle fiel a Él y a su palabra, pero sobre todo, el hecho de que en mi imperfección Dios me ha hecho perfecto en Él.
Los esfuerzos que yo pueda hacer, no me ayudan, las obras que yo haya hecho para Él no me ayudan, las iglesias que he plantado, no me ayudan, las personas que han venido a él a través de mi labor tampoco me ayudan. Lo único que me da esa seguridad, es su gracia y el regalo de la salvación que él me dio cuando vine a él con un corazón arrepentido, y en lágrimas y sollozos clamé por su misericordia y su perdón, el día que di mi vida a Él y Él se convirtió en mi Señor y mi Salvador.
Haz lo que yo hice, y atrapa la seguridad de la vida eterna, en su gloria.
El tiempo apremia. Prepárate.
José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
sábado, 16 de octubre de 2010
Perdido en la Salvación!
Pues ustedes eran como ovejas descarriadas, pero ahora han vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas. (1 Pedro 2:25).
¿Cómo puedo encontrar justificación en chapotear y rodar en el lodo todo el día hasta el punto de ser cubierto de barro de pies a cabeza, y luego ir a mi casa, la casa que mantengo limpia y ordenada y organizada, y entrar sin ningún cuidado, caminando por toda la alfombra limpia con los zapatos embarrados, y sentarme en todas partes con la ropa sucia, y acostarme en la cama con mis vestidos mugrosos y así sucesivamente, y no ver ningún problema en esto?
¿No sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, el cual habéis recibido de Dios? Ustedes no son sus propios dueños, fueron comprados por un precio. Por lo tanto honrad a Dios con tu cuerpo. (1 Corintios 6:19-20).
Creo que el problema radica en una falta de entendimiento.
El mundo moderno ha hecho una serie de ajustes al concepto de cristianismo los cuales son insoportables, por decir lo menos, a quienes profesan ser verdaderos seguidores de Cristo. Y es que como estamos "en constante cambio" debemos "ajustarnos" a las formas modernas, y ser "flexibles" por lo cual podemos “fumarnos dos paquetes de cigarrillos al día, siempre y cuando vallamos a la iglesia al menos una vez a la semana”; está bien “emborracharse de vez en cuando, o fumarse un inofensivo chancho, siempre y cuando le demos los diezmos y ofrendas a la iglesia”, y está perfectamente bien si “está teniendo relaciones sexuales fuera del matrimonio, o si usted tiene un asuntito aquí y allá, o si está involucrado en fiestas salvajes, en pornografía o en comportamiento lascivo, o si se regocija con la mugre que el mundo tiene para ofrecer, siempre y cuando sea fiel a su iglesia y participe en actividades de la iglesia de vez en cuando”, usted entiende la idea! Y nos fijamos en nuestras congregaciones y nos dan ganas de gritar en frustración e indignación, pero hay que ser "políticamente correcto" y entender que este es un problema "entre ellos y Dios".
No, no lo es! Eso no es lo que dice la Biblia, la Biblia que yo estudio dice: "entreguen este hombre a Satanás, de modo que la carne pueda ser destruida y su espíritu sea salvo en el día del Señor". (1 Corintios 5:5).
La Biblia que yo estudio indica claramente en todas sus versiones conocidas que no se deje engañar, ya que los injustos no heredarán el reino de Dios. (1 Corintios 6:9). Y aun va más allá, pues nos enseña que ni los fornicarios, ni idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. (V 10). Y la lista continúa.
Eso es lo que éramos cuando estábamos en el mundo, pero hemos sido lavados por la sangre de Cristo, por la sangre del Cordero de Dios, que se hizo pecado por nosotros para que pudiéramos tener la justicia de Cristo. Y porque hemos sido hechos justos, debemos caminar en la justicia.
De acuerdo con aquellos que mantienen notas estadísticas, hay más de treinta y ocho mil denominaciones cristianas en el mundo, y todas estas están, aparentemente centradas en Jesucristo.
A riesgo de sonar arrogante puedo afirmar, creo en la diversidad y en el hecho de que es imposible que una sola denominación pueda recoger la gran variedad de pensamientos que conforman la humanidad, pero 38.000? Eso es ridículo! Y el mayor problema radica en el hecho de que muchas de las denominaciones mas prominentes a menudo son las que se apartan de las enseñanzas del Evangelio, muchas de ellas han creado un nuevo evangelio para satisfacer sus ideas mundanas del cristianismo. Esto es apostasía! Y si ellos no pueden verlo de esa manera es porque no leen o no entienden la palabra de Dios, de hecho estoy seguro de que estos ciegos no están leyendo la misma Biblia que yo leo.
"En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe y se traicionaran y se odiaran entre sí, y muchos falsos profetas aparecerán, y engañarán a mucha gente. Debido al aumento de la maldad, el amor de muchos se enfriará. "(Mateo 24:10-12)
"Porque tú dices: Yo soy rico, me he enriquecido, y no me falta nada." Pero no te das cuenta que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que puedas llegar a ser rico, y vestiduras blancas para vestirte, para que puedas cubrir tu vergonzosa desnudez, y colirio para ungir tus ojos, para que puedas ver. Aquellos a quienes yo amo reprendo y castigo. Por lo tanto, sé fervoroso y arrepiéntete. "(Apocalipsis 3:17-19).
El Evangelio de Jesucristo aparenta estar en ruinas, mientras que nuestras iglesias se llenan de almas perdidas, de personas que no tienen idea acerca de la salvación, y sin embargo, piensan que son salvos.
La salvación es un caminar, no es una carrera, no es estática, o estancada, no es algo que hacemos un día y luego olvidamos. la salvación no es decirle que sí a Jesús y luego seguir con nuestras vidas como si hubiese pasado nada, la salvación es una jornada diaria con el Señor, es un estilo de vida, un caminar hacia la santidad y la justicia de Dios.
Si usted no siente la culpa del pecado, si no esta dedicado a la vida cristiana, a el estudio de la Biblia y a una vida de oración, si usted está haciendo alguna o varias de las cosas pecaminosas que he mencionado anteriormente, o cualquiera de las muchas otras que no he mencionado, y si usted no siente el Espíritu Santo de Dios golpeando su puerta diciéndole que está pecando gravemente y que si no se arrepiente va a terminar en el infierno, entonces usted tiene un problema, porque usted no esta salvo.
Y si usted cree que por ir a la iglesia o ayudar al prójimo de vez en cuando está bien con Cristo, usted está equivocado, por lo cual le exhorto a correr hacia el altar; arrodíllese y arrepiéntase y pídale a Dios que limpie su corazón, porque de lo contrario, usted va a pasar su vida eterna en el infierno.
Por otro lado, si usted va a una iglesia que está haciendo otra cosa que no sea predicar el evangelio de Jesús Cristo, una iglesia que está complaciendo a los hombres en lugar de a Dios, una iglesia que es más un club social que una casa de oración y adoración , entonces corra por su vida, salga de allí corriendo y encuentre una de las muchas iglesias que aun siguen fielmente la palabra de Dios, y que se empeñan en exaltar al Señor Jesucristo y traer la transformación a las almas a través de la oración y la predicación y la enseñanza del Evangelio, sin compromiso.
Si usted sabe que usted no ha dado su corazón a Jesús, o si tiene alguna duda al respecto, independientemente de si va a la iglesia regularmente o no, entonces es el momento para que usted clame al Señor que le perdone sus pecados, y recíbale como su Señor y Salvador.
Si necesita ayuda, envíenos una nota o visite el sitio Web casadesalvación.com.
Que el Señor de todas las maravillas continúe haciendo maravillas en sus vidas!
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
¿Cómo puedo encontrar justificación en chapotear y rodar en el lodo todo el día hasta el punto de ser cubierto de barro de pies a cabeza, y luego ir a mi casa, la casa que mantengo limpia y ordenada y organizada, y entrar sin ningún cuidado, caminando por toda la alfombra limpia con los zapatos embarrados, y sentarme en todas partes con la ropa sucia, y acostarme en la cama con mis vestidos mugrosos y así sucesivamente, y no ver ningún problema en esto?
¿No sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, el cual habéis recibido de Dios? Ustedes no son sus propios dueños, fueron comprados por un precio. Por lo tanto honrad a Dios con tu cuerpo. (1 Corintios 6:19-20).
Creo que el problema radica en una falta de entendimiento.
El mundo moderno ha hecho una serie de ajustes al concepto de cristianismo los cuales son insoportables, por decir lo menos, a quienes profesan ser verdaderos seguidores de Cristo. Y es que como estamos "en constante cambio" debemos "ajustarnos" a las formas modernas, y ser "flexibles" por lo cual podemos “fumarnos dos paquetes de cigarrillos al día, siempre y cuando vallamos a la iglesia al menos una vez a la semana”; está bien “emborracharse de vez en cuando, o fumarse un inofensivo chancho, siempre y cuando le demos los diezmos y ofrendas a la iglesia”, y está perfectamente bien si “está teniendo relaciones sexuales fuera del matrimonio, o si usted tiene un asuntito aquí y allá, o si está involucrado en fiestas salvajes, en pornografía o en comportamiento lascivo, o si se regocija con la mugre que el mundo tiene para ofrecer, siempre y cuando sea fiel a su iglesia y participe en actividades de la iglesia de vez en cuando”, usted entiende la idea! Y nos fijamos en nuestras congregaciones y nos dan ganas de gritar en frustración e indignación, pero hay que ser "políticamente correcto" y entender que este es un problema "entre ellos y Dios".
No, no lo es! Eso no es lo que dice la Biblia, la Biblia que yo estudio dice: "entreguen este hombre a Satanás, de modo que la carne pueda ser destruida y su espíritu sea salvo en el día del Señor". (1 Corintios 5:5).
La Biblia que yo estudio indica claramente en todas sus versiones conocidas que no se deje engañar, ya que los injustos no heredarán el reino de Dios. (1 Corintios 6:9). Y aun va más allá, pues nos enseña que ni los fornicarios, ni idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. (V 10). Y la lista continúa.
Eso es lo que éramos cuando estábamos en el mundo, pero hemos sido lavados por la sangre de Cristo, por la sangre del Cordero de Dios, que se hizo pecado por nosotros para que pudiéramos tener la justicia de Cristo. Y porque hemos sido hechos justos, debemos caminar en la justicia.
De acuerdo con aquellos que mantienen notas estadísticas, hay más de treinta y ocho mil denominaciones cristianas en el mundo, y todas estas están, aparentemente centradas en Jesucristo.
A riesgo de sonar arrogante puedo afirmar, creo en la diversidad y en el hecho de que es imposible que una sola denominación pueda recoger la gran variedad de pensamientos que conforman la humanidad, pero 38.000? Eso es ridículo! Y el mayor problema radica en el hecho de que muchas de las denominaciones mas prominentes a menudo son las que se apartan de las enseñanzas del Evangelio, muchas de ellas han creado un nuevo evangelio para satisfacer sus ideas mundanas del cristianismo. Esto es apostasía! Y si ellos no pueden verlo de esa manera es porque no leen o no entienden la palabra de Dios, de hecho estoy seguro de que estos ciegos no están leyendo la misma Biblia que yo leo.
"En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe y se traicionaran y se odiaran entre sí, y muchos falsos profetas aparecerán, y engañarán a mucha gente. Debido al aumento de la maldad, el amor de muchos se enfriará. "(Mateo 24:10-12)
"Porque tú dices: Yo soy rico, me he enriquecido, y no me falta nada." Pero no te das cuenta que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que puedas llegar a ser rico, y vestiduras blancas para vestirte, para que puedas cubrir tu vergonzosa desnudez, y colirio para ungir tus ojos, para que puedas ver. Aquellos a quienes yo amo reprendo y castigo. Por lo tanto, sé fervoroso y arrepiéntete. "(Apocalipsis 3:17-19).
El Evangelio de Jesucristo aparenta estar en ruinas, mientras que nuestras iglesias se llenan de almas perdidas, de personas que no tienen idea acerca de la salvación, y sin embargo, piensan que son salvos.
La salvación es un caminar, no es una carrera, no es estática, o estancada, no es algo que hacemos un día y luego olvidamos. la salvación no es decirle que sí a Jesús y luego seguir con nuestras vidas como si hubiese pasado nada, la salvación es una jornada diaria con el Señor, es un estilo de vida, un caminar hacia la santidad y la justicia de Dios.
Si usted no siente la culpa del pecado, si no esta dedicado a la vida cristiana, a el estudio de la Biblia y a una vida de oración, si usted está haciendo alguna o varias de las cosas pecaminosas que he mencionado anteriormente, o cualquiera de las muchas otras que no he mencionado, y si usted no siente el Espíritu Santo de Dios golpeando su puerta diciéndole que está pecando gravemente y que si no se arrepiente va a terminar en el infierno, entonces usted tiene un problema, porque usted no esta salvo.
Y si usted cree que por ir a la iglesia o ayudar al prójimo de vez en cuando está bien con Cristo, usted está equivocado, por lo cual le exhorto a correr hacia el altar; arrodíllese y arrepiéntase y pídale a Dios que limpie su corazón, porque de lo contrario, usted va a pasar su vida eterna en el infierno.
Por otro lado, si usted va a una iglesia que está haciendo otra cosa que no sea predicar el evangelio de Jesús Cristo, una iglesia que está complaciendo a los hombres en lugar de a Dios, una iglesia que es más un club social que una casa de oración y adoración , entonces corra por su vida, salga de allí corriendo y encuentre una de las muchas iglesias que aun siguen fielmente la palabra de Dios, y que se empeñan en exaltar al Señor Jesucristo y traer la transformación a las almas a través de la oración y la predicación y la enseñanza del Evangelio, sin compromiso.
Si usted sabe que usted no ha dado su corazón a Jesús, o si tiene alguna duda al respecto, independientemente de si va a la iglesia regularmente o no, entonces es el momento para que usted clame al Señor que le perdone sus pecados, y recíbale como su Señor y Salvador.
Si necesita ayuda, envíenos una nota o visite el sitio Web casadesalvación.com.
Que el Señor de todas las maravillas continúe haciendo maravillas en sus vidas!
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
lunes, 11 de octubre de 2010
Una Oración de Gracias!
Bendito sea tu Santo y Divino Nombre Señor. Padre amado que estas en los cielos, te doy gracias hoy porque no es simplemente un día mas; es un día mas que tu has creado, un día mas que nos has regalado y en el cual esta contenida toda la maravilla de tu divinidad y de tu perfecto orden; un día en el que tu nos has puesto juntos para adorarte y hacer un poco mejor la tierra al traer a otros razones para ver tu presencia en el.
No es solamente un milagro el que estemos tan cerca de ti señor, pues un milagro es algo imposible hecho posible. Es infinitamente más que un milagro el que hoy nuestro hogar este impregnado de tu presencia, es un milagro divino revestido de tu gracia, la única que pudo haber realizado semejante hazaña. Pues como personas éramos no más que dos sombras del mismo Satanás, vestidos con manchas de pecado desde la cabeza hasta los pies, y sin esperanza alguna siquiera de poder ver que nuestras vidas estaban podridas y que caminábamos aceleradamente hacia el infierno.
Se que hay muchas personas perdidas en el mundo, pero no creo que exista nadie que pueda estar inmerso en tal nivel de corruptibilidad como lo estábamos yo y mi pareja,
Y de un solo golpe tú nos arrebataste de las garras de Leviatán, tú nos arrastraste fuera de los tenebrosos callejones de perdición en que caminábamos y nos trajiste a la brillante luz de tu redención; nos tomaste de la mano y nos llevaste a la vida eterna en tu presencia. Y allí nos has permitido encontrar una vida de sorpresas continuas, de alegrías permanentes, de constante regocijo, y una vida de amor y compasión y comprensión, en la que tú nos revelas todos los días nuevas maneras de ser, la cuales nos acercan aun más a ti.
Y en este día señor queremos darte las gracias, no porque el mundo a decidido hacer este un día para dar gracias, sino porque todos los días tenemos razones suficientes para vivir arrodillados ante ti, postrados en tu presencia diciéndote gracias señor, por un milagro que sobrepasa lo sobrenatural, por un imposible hecho posible en ti, porque hoy podemos ver a nuestros hijos disfrutar de ese hermoso regalo que es tu gracia, y podemos sentir la inmensa paz que solo tu puedes dar.
Te damos gracias señor, pues podemos con certeza decir que nuestras vidas están completas, que no nos falta absolutamente nada pues te tenemos a ti, y que no hay mancha mundana que pueda tentarnos, la cual no podamos rechazar, solo porque tu nos has dado el poder para discernir las mentiras del mundo, y mantenernos bañados en tu sangre.
Te damos gracias señor pues hay un mundo real el cual solo aquellos que tu has escogido pueden ver, y tu nos has incluido entre esos que tu has tocado con el regalo de la vida eterna, y podemos distinguir claramente la separación entre tu reino aquí en la tierra y el reino del príncipe de la mentira el cual como una película tridimensional, nos pasa por el frente mostrando sus artimañas seductoras las cuales tienen atrapadas a tantos hombres y mujeres de bien.
Te damos gracias señor, porque aun cuando los constantes golpes del enemigo a veces perforan la poderosa armadura con la cual nos has cubierto y las manchas se aferran a nuestro frágil naturaleza de pecado, tu sangre señor con la cual has cubierto nuestra alma y nuestro espíritu rápidamente diluye esas oscuras manchas, manteniéndonos brillantes y llenos de tu justicia ante la presencia de Dios.
Gracias señor, porque pagaste un precio muy alto por cada uno de nosotros, aun cuando éramos tus enemigos, gracias señor, pues diariamente me permites ver y aprender aun mas de ti, y crecer y madurar y extender la mano a otros que quizás aun no te conocen, y que necesitan un hombro donde apoyase para alcanzar tu mano.
Gracias señor, pues en mi imperfección tu me haces perfecto, porque en mis desagravios tu me agradas, porque en todas mis tormentas estas tu calmando las aguas y manteniendo los días claros
Gracias señor, pues hoy puedo gritar con verdadero gozo Aleluya, Yahvé vive y yo vivo en el y el vive en mi, y ya no hay mas aburrimiento o temor o miseria o necesidad o enfermedad, mi gozo es infinito señor, y mi razón para vivir es tan inmensamente hermosa como lo será mi razón para morir cuando tu me llames a tu presencia, pues viviendo vivo en ti, y todos los falsos sueños y regalos y diversiones manipulados por el mundo nunca podrán igualar la permanente alegría el permanente gozo de vivir en ti.
Y cuando me llames a tu presencia moriré en ti, y en tu eterna presencia viviré, donde todas las cosas son perfectas.
Gracias señor Jesús, sencillamente gracias, Amen
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
No es solamente un milagro el que estemos tan cerca de ti señor, pues un milagro es algo imposible hecho posible. Es infinitamente más que un milagro el que hoy nuestro hogar este impregnado de tu presencia, es un milagro divino revestido de tu gracia, la única que pudo haber realizado semejante hazaña. Pues como personas éramos no más que dos sombras del mismo Satanás, vestidos con manchas de pecado desde la cabeza hasta los pies, y sin esperanza alguna siquiera de poder ver que nuestras vidas estaban podridas y que caminábamos aceleradamente hacia el infierno.
Se que hay muchas personas perdidas en el mundo, pero no creo que exista nadie que pueda estar inmerso en tal nivel de corruptibilidad como lo estábamos yo y mi pareja,
Y de un solo golpe tú nos arrebataste de las garras de Leviatán, tú nos arrastraste fuera de los tenebrosos callejones de perdición en que caminábamos y nos trajiste a la brillante luz de tu redención; nos tomaste de la mano y nos llevaste a la vida eterna en tu presencia. Y allí nos has permitido encontrar una vida de sorpresas continuas, de alegrías permanentes, de constante regocijo, y una vida de amor y compasión y comprensión, en la que tú nos revelas todos los días nuevas maneras de ser, la cuales nos acercan aun más a ti.
Y en este día señor queremos darte las gracias, no porque el mundo a decidido hacer este un día para dar gracias, sino porque todos los días tenemos razones suficientes para vivir arrodillados ante ti, postrados en tu presencia diciéndote gracias señor, por un milagro que sobrepasa lo sobrenatural, por un imposible hecho posible en ti, porque hoy podemos ver a nuestros hijos disfrutar de ese hermoso regalo que es tu gracia, y podemos sentir la inmensa paz que solo tu puedes dar.
Te damos gracias señor, pues podemos con certeza decir que nuestras vidas están completas, que no nos falta absolutamente nada pues te tenemos a ti, y que no hay mancha mundana que pueda tentarnos, la cual no podamos rechazar, solo porque tu nos has dado el poder para discernir las mentiras del mundo, y mantenernos bañados en tu sangre.
Te damos gracias señor pues hay un mundo real el cual solo aquellos que tu has escogido pueden ver, y tu nos has incluido entre esos que tu has tocado con el regalo de la vida eterna, y podemos distinguir claramente la separación entre tu reino aquí en la tierra y el reino del príncipe de la mentira el cual como una película tridimensional, nos pasa por el frente mostrando sus artimañas seductoras las cuales tienen atrapadas a tantos hombres y mujeres de bien.
Te damos gracias señor, porque aun cuando los constantes golpes del enemigo a veces perforan la poderosa armadura con la cual nos has cubierto y las manchas se aferran a nuestro frágil naturaleza de pecado, tu sangre señor con la cual has cubierto nuestra alma y nuestro espíritu rápidamente diluye esas oscuras manchas, manteniéndonos brillantes y llenos de tu justicia ante la presencia de Dios.
Gracias señor, porque pagaste un precio muy alto por cada uno de nosotros, aun cuando éramos tus enemigos, gracias señor, pues diariamente me permites ver y aprender aun mas de ti, y crecer y madurar y extender la mano a otros que quizás aun no te conocen, y que necesitan un hombro donde apoyase para alcanzar tu mano.
Gracias señor, pues en mi imperfección tu me haces perfecto, porque en mis desagravios tu me agradas, porque en todas mis tormentas estas tu calmando las aguas y manteniendo los días claros
Gracias señor, pues hoy puedo gritar con verdadero gozo Aleluya, Yahvé vive y yo vivo en el y el vive en mi, y ya no hay mas aburrimiento o temor o miseria o necesidad o enfermedad, mi gozo es infinito señor, y mi razón para vivir es tan inmensamente hermosa como lo será mi razón para morir cuando tu me llames a tu presencia, pues viviendo vivo en ti, y todos los falsos sueños y regalos y diversiones manipulados por el mundo nunca podrán igualar la permanente alegría el permanente gozo de vivir en ti.
Y cuando me llames a tu presencia moriré en ti, y en tu eterna presencia viviré, donde todas las cosas son perfectas.
Gracias señor Jesús, sencillamente gracias, Amen
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
domingo, 10 de octubre de 2010
No mi Voluntad, Sino la Tuya!
Imagínate que estás de pie sobre una pista, y hay un tren de carga moviéndose rápidamente hacia ti, imagina que puedes ver que viene este tren de alta velocidad, y que sabes que cuando llegue a ti te va a golpear duro, pero no te va a matar al instante, sino que te va a arrastrar debajo contra la tierra y los rieles, arrancando tu piel y tu carne, y golpeándote a izquierda y derecha, y vas a estar lentamente sintiendo el horrible dolor, la tortura mientras el tren avanza, y no puedes hacer nada al respecto. Tú sabes que esto va a suceder, pero no puedes moverte del paso del tren. ¿Qué tendrías en tu corazón en un momento como ese? ¿Cuáles serían tus pensamientos? ¿Cuál sería tu plegaria, tu oración?
Jesús estaba de rodillas en Getsemaní, con su rostro pegado a la tierra, aferrado a una oración intensa, pues él sabía lo que venía, sabía todos los detalles gráficos de las horas que estaban delante de él, y él sabía que tenía que soportarlo. Pues en su naturaleza misma de Dios, Él lo había previsto todo; el látigo y las espinas y los clavos y la lanza y los insultos y la humillación, pero sobre todo, él había previsto el rechazo de el único ser que en ese momento le importaba, había visto la separación, y el rostro del padre alejarse de él.
"Mi alma está muy triste, hasta el punto de la muerte", dijo él (Marcos 14:34)
Y estando en angustia, él oraba más intensamente, y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían al suelo. (Lucas 22:44)
(Hematidrosis (también llamado hematohidrosis) es una condición muy rara en la cual un ser humano suda sangre. Esto puede ocurrir cuando una persona está sufriendo altos niveles de estrés, por ejemplo, al confrontar su propia muerte. Ref. Wikipedia)
No podríamos comprender el estado de ánimo y el comportamiento de una persona en tales circunstancias, y Jesús pudo perfectamente haberse marchado, El pudo haber decidido, ‘yo no voy a pasar por esto’, y simplemente marcharse con sus discípulos a otros lugares, fuera del alcance de la multitud que venía a buscarlo, pero él entendía que la única manera de llegar al otro lado era caminar por ese valle de las sombras, él sabía que a menos que ese tren de carga lo golpeara, y lo arrastrara a lo largo de la pista abatiéndolo contra los rieles y la tierra, a menos que Él fuese golpeado y torturado, a menos que su sangre fuese derramada por las calles de Jerusalén, a menos que los clavos fueren martillados a través de sus manos y pies, y, a menos que Él soportara las horas de agonía, no habría redención para el mundo, no habría una expiación, no habría borrón y cuenta nueva, sólo la maldición y la condenación eterna para toda persona humana.
"Sin embargo, no se haga mi voluntad sino la tuya" (Lucas 22:42)
No creo que tenemos la capacidad para asimilar tales circunstancias, y puedo afirmar casi con seguridad que cualquiera de nosotros se habría levantado y se hubiese marchado. Sin embargo, la historia nos enseña que los cristianos cantaban himnos en las calles de Roma mientras estas eran iluminadas con sus cuerpos quemados en los tiempos de Nerón, también leemos a menudo de aquellos que viven en las zonas rojas y de los misioneros que ignoran el peligro para servir a nuestros Señor Jesús y llevar el evangelio a las naciones. Con frecuencia leemos de los encarcelamientos y los asesinatos y abusos en muchos países del mundo. Se trata de personas como tú y yo, excepto que ellos están dispuestos a pararse frente al tren de carga, confiando en que Dios lo descarrilara o cambiara su dirección. Y a menudo oímos los milagros en esas naciones, escuchamos como el poder de Dios se mueve de manera extraordinaria, y en contra de todo pronóstico trayendo la ayuda y la esperanza y la salvación, trayendo la luz donde sólo había oscuridad.
El pasado mes de agosto, diez misioneros médicos cristianos fueron asesinados en Afganistán, entre ellos seis estadounidenses un británico y un alemán. Estos fueron asesinados supuestamente por tratar de convertir al cristianismo a los musulmanes.
La persecución hoy día se ha extendido. Es más peligroso predicar el evangelio hoy día en la mayoría de los lugares en el mundo de lo que era en la época de los apóstoles. Y aun así muchos hombres y mujeres avanzan, dispuestos a dar sus vidas por el amor a Jesús. Muchos están dispuestos a permitir que ese tren de carga les atropelle, incluso si ello implica la angustia y el sufrimiento, y que les sea rasgada la piel y la carne.
Fuimos llamados a ser misioneros, estas fueron claramente las instrucciones de nuestro Señor Jesucristo antes de su ascensión; Id, y haced discípulos a todas las naciones. Y si llegamos a ser misioneros en nuestro propio patio, o a diez mil millas de distancia de nuestro hogar, debemos estar dispuestos a arriesgar nuestra comodidad, a romper nuestra burbuja, y a ponernos de pie delante de ese tren de carga.
Debemos estar dispuestos a decirle al Señor "no se haga mi voluntad sino la tuya" porque sabemos que ni un solo pelo en nuestra cabeza se caerá si no es su voluntad, y no importa dónde estemos o lo que hagamos, cuando ese tren de carga viene, vamos a ser golpeados. Y si vivimos o morimos, vivimos para el Señor, y morimos para el Señor.
Que la voluntad de Dios prevalezca en sus vidas en toda circunstancia.
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
Jesús estaba de rodillas en Getsemaní, con su rostro pegado a la tierra, aferrado a una oración intensa, pues él sabía lo que venía, sabía todos los detalles gráficos de las horas que estaban delante de él, y él sabía que tenía que soportarlo. Pues en su naturaleza misma de Dios, Él lo había previsto todo; el látigo y las espinas y los clavos y la lanza y los insultos y la humillación, pero sobre todo, él había previsto el rechazo de el único ser que en ese momento le importaba, había visto la separación, y el rostro del padre alejarse de él.
"Mi alma está muy triste, hasta el punto de la muerte", dijo él (Marcos 14:34)
Y estando en angustia, él oraba más intensamente, y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían al suelo. (Lucas 22:44)
(Hematidrosis (también llamado hematohidrosis) es una condición muy rara en la cual un ser humano suda sangre. Esto puede ocurrir cuando una persona está sufriendo altos niveles de estrés, por ejemplo, al confrontar su propia muerte. Ref. Wikipedia)
No podríamos comprender el estado de ánimo y el comportamiento de una persona en tales circunstancias, y Jesús pudo perfectamente haberse marchado, El pudo haber decidido, ‘yo no voy a pasar por esto’, y simplemente marcharse con sus discípulos a otros lugares, fuera del alcance de la multitud que venía a buscarlo, pero él entendía que la única manera de llegar al otro lado era caminar por ese valle de las sombras, él sabía que a menos que ese tren de carga lo golpeara, y lo arrastrara a lo largo de la pista abatiéndolo contra los rieles y la tierra, a menos que Él fuese golpeado y torturado, a menos que su sangre fuese derramada por las calles de Jerusalén, a menos que los clavos fueren martillados a través de sus manos y pies, y, a menos que Él soportara las horas de agonía, no habría redención para el mundo, no habría una expiación, no habría borrón y cuenta nueva, sólo la maldición y la condenación eterna para toda persona humana.
"Sin embargo, no se haga mi voluntad sino la tuya" (Lucas 22:42)
No creo que tenemos la capacidad para asimilar tales circunstancias, y puedo afirmar casi con seguridad que cualquiera de nosotros se habría levantado y se hubiese marchado. Sin embargo, la historia nos enseña que los cristianos cantaban himnos en las calles de Roma mientras estas eran iluminadas con sus cuerpos quemados en los tiempos de Nerón, también leemos a menudo de aquellos que viven en las zonas rojas y de los misioneros que ignoran el peligro para servir a nuestros Señor Jesús y llevar el evangelio a las naciones. Con frecuencia leemos de los encarcelamientos y los asesinatos y abusos en muchos países del mundo. Se trata de personas como tú y yo, excepto que ellos están dispuestos a pararse frente al tren de carga, confiando en que Dios lo descarrilara o cambiara su dirección. Y a menudo oímos los milagros en esas naciones, escuchamos como el poder de Dios se mueve de manera extraordinaria, y en contra de todo pronóstico trayendo la ayuda y la esperanza y la salvación, trayendo la luz donde sólo había oscuridad.
El pasado mes de agosto, diez misioneros médicos cristianos fueron asesinados en Afganistán, entre ellos seis estadounidenses un británico y un alemán. Estos fueron asesinados supuestamente por tratar de convertir al cristianismo a los musulmanes.
La persecución hoy día se ha extendido. Es más peligroso predicar el evangelio hoy día en la mayoría de los lugares en el mundo de lo que era en la época de los apóstoles. Y aun así muchos hombres y mujeres avanzan, dispuestos a dar sus vidas por el amor a Jesús. Muchos están dispuestos a permitir que ese tren de carga les atropelle, incluso si ello implica la angustia y el sufrimiento, y que les sea rasgada la piel y la carne.
Fuimos llamados a ser misioneros, estas fueron claramente las instrucciones de nuestro Señor Jesucristo antes de su ascensión; Id, y haced discípulos a todas las naciones. Y si llegamos a ser misioneros en nuestro propio patio, o a diez mil millas de distancia de nuestro hogar, debemos estar dispuestos a arriesgar nuestra comodidad, a romper nuestra burbuja, y a ponernos de pie delante de ese tren de carga.
Debemos estar dispuestos a decirle al Señor "no se haga mi voluntad sino la tuya" porque sabemos que ni un solo pelo en nuestra cabeza se caerá si no es su voluntad, y no importa dónde estemos o lo que hagamos, cuando ese tren de carga viene, vamos a ser golpeados. Y si vivimos o morimos, vivimos para el Señor, y morimos para el Señor.
Que la voluntad de Dios prevalezca en sus vidas en toda circunstancia.
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
viernes, 8 de octubre de 2010
Llenar el Calzado de Jesús!
Me gustaría atreverme a ponerme los zapatos de Jesús, mas las muchas veces que estos pensamientos vinieron a mi mente he tenido que parar y pensar, y todos mis defectos y mis complejos y limitaciones han invadido mis pensamientos, y rápidamente me he desanimado.
Quiero decir, ¿cómo podría yo pensar siquiera por un minuto en ser comparado con el rey de reyes? ¿cómo podía caber en mis pensamientos la idea de parecerme al único hombre perfecto que jamás haya existido en este planeta? Y, sin embargo no me desanimo porque no pueda ser como él, sino porque soy un cobarde, uno con apenas la fe suficiente para calificar para la salvación, pero que no posee la capacidad para superar todas las debilidades humanas.
Es cierto que en términos humanos, es imposible vivir una vida de santidad, y que sólo por el poder del espíritu podemos llegar a ser triunfadores para el reino de Dios. Pero aun cuando el Espíritu batalla con la carne arrebatándole su poder y tomando el control de la actitud y los procesos de pensamiento en una persona redimida, estamos hablando de una batalla de proporciones épicas, ya que el poder de la carne, el cual ha prevalecido en su mayor parte en mantenernos en el pecado no desfallece fácilmente, no se somete con facilidad a las imposiciones del espíritu, incluso a medida que maduramos en el conocimiento de Dios.
Yo había caminado en la oscuridad por mucho tiempo, y aunque la amplia experiencia que viene con una vida turbulenta nos da el poder para proteger nuestro recién descubierto tesoro con pasión feroz, y el hambre de querer acumular más de este tesoro, a través de regalárselo a aquellos que aún no lo han encontrado, el doloroso reflejo en el pasado es sin duda un desafío, ya que siempre nos persigue, y a menudo retorna a darnos batalla a través de la tentación.
Tendemos a pensar que los que nacen en la fe lo tienen fácil, porque ellos no conocen la verdadera maldad, ellos no han estado expuestos a las garras y las fauces de la perversión y la inmoralidad y el libertinaje en toda su extensión, e igualmente tenemos la tendencia pensar que ellos lo tienen peor, pues la apostasía está siempre a la puerta, a causa de su inexperiencia.
Pero la verdad es, la depravación, no tiene misericordia de nadie, porque es un residente permanente en nuestra identidad, es una parte intrínseca de lo que somos, es la suciedad incrustada en nuestro ADN. Y aquellos que afirman haber logrado la pureza, a ellos, yo los llamo mentirosos en su cara, pues esta no es una bandera que nos pertenece, incluso cuando nos convertimos en estudiosos de la palabra, aun cuando podemos afirmar que realmente conocemos al padre.
Así que pretender ser como el hijo del Dios viviente es sólo para tontos, es sólo para los de mente estrecha y los ingenuos,
Aquellos de nosotros que de verdad entienden las consecuencias de tales pretensiones, acaban por lanzarse boca abajo en el suelo y pedir la misericordia de Jehová,
Su gracia es un asunto de su soberanía, y Él sonríe mientras nos ve tratando tan arduamente de agradarle, cuando nos ve luchando por hacer mucho por él. Y tan a menudo decimos que lo hacemos porque lo amamos, sin embargo, en el fondo de nuestra mente estamos frecuentemente, aun sin darnos cuenta, tratando de ganar puntos, de merecernos nuestro ascenso hacia arriba. Cuan despreciable insensatez, pues mientras nos empeñamos en construir una casa para él, estamos frecuentemente, aun inconscientemente instalando ladrillos defectuosos en la misma, y aun si nuestra fundación fuera o no la roca de la salvación, el Cordero de sacrificio, cada capa que construimos esta simplemente llena de agujeros, y el colapso inminente se avecina, aun mientras desplegamos con orgullo la grandeza de aquel para quien construimos, sin mirar a nuestros verdaderos motivos.
Jesús nunca esperó que fuésemos como él, todo lo que pidió es que seamos fieles a su palabra,
Una vez nos dijo que haríamos mas grandes cosas que las que Él hizo, y tratamos de construir un castillo para él, excepto que lo construimos en la arena. Todo lo que Él espera de nosotros es que mantengamos su nombre en nuestro corazón y nuestra mente y nuestros labios; eso es todo lo que realmente nos ha pedido.
En todos los casos Él escogió a cada uno de sus discípulos diciéndoles "sígueme", Él inclusive nos dijo "Estén en mí como yo estoy en ustedes", lo cual no se traduce "hazte igual a mi"
Sé perfectamente que no puedo ser Jesús, esto sería inverosímil, se que ni siquiera podría pretender ser una buena imitación, no mientras estoy en esta carne de corrupción, la cual continua siendo pecadora aun mientras yo la golpeo, la castigo y la obligo a someterse todos los días al conocimiento de Jesús.
Todo lo que espero poder ser es sólo un buen discípulo.
¿Tú quieres tratar de llenar el calzado de Jesús? Solo da gracia, como él te dio gracia!
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
Quiero decir, ¿cómo podría yo pensar siquiera por un minuto en ser comparado con el rey de reyes? ¿cómo podía caber en mis pensamientos la idea de parecerme al único hombre perfecto que jamás haya existido en este planeta? Y, sin embargo no me desanimo porque no pueda ser como él, sino porque soy un cobarde, uno con apenas la fe suficiente para calificar para la salvación, pero que no posee la capacidad para superar todas las debilidades humanas.
Es cierto que en términos humanos, es imposible vivir una vida de santidad, y que sólo por el poder del espíritu podemos llegar a ser triunfadores para el reino de Dios. Pero aun cuando el Espíritu batalla con la carne arrebatándole su poder y tomando el control de la actitud y los procesos de pensamiento en una persona redimida, estamos hablando de una batalla de proporciones épicas, ya que el poder de la carne, el cual ha prevalecido en su mayor parte en mantenernos en el pecado no desfallece fácilmente, no se somete con facilidad a las imposiciones del espíritu, incluso a medida que maduramos en el conocimiento de Dios.
Yo había caminado en la oscuridad por mucho tiempo, y aunque la amplia experiencia que viene con una vida turbulenta nos da el poder para proteger nuestro recién descubierto tesoro con pasión feroz, y el hambre de querer acumular más de este tesoro, a través de regalárselo a aquellos que aún no lo han encontrado, el doloroso reflejo en el pasado es sin duda un desafío, ya que siempre nos persigue, y a menudo retorna a darnos batalla a través de la tentación.
Tendemos a pensar que los que nacen en la fe lo tienen fácil, porque ellos no conocen la verdadera maldad, ellos no han estado expuestos a las garras y las fauces de la perversión y la inmoralidad y el libertinaje en toda su extensión, e igualmente tenemos la tendencia pensar que ellos lo tienen peor, pues la apostasía está siempre a la puerta, a causa de su inexperiencia.
Pero la verdad es, la depravación, no tiene misericordia de nadie, porque es un residente permanente en nuestra identidad, es una parte intrínseca de lo que somos, es la suciedad incrustada en nuestro ADN. Y aquellos que afirman haber logrado la pureza, a ellos, yo los llamo mentirosos en su cara, pues esta no es una bandera que nos pertenece, incluso cuando nos convertimos en estudiosos de la palabra, aun cuando podemos afirmar que realmente conocemos al padre.
Así que pretender ser como el hijo del Dios viviente es sólo para tontos, es sólo para los de mente estrecha y los ingenuos,
Aquellos de nosotros que de verdad entienden las consecuencias de tales pretensiones, acaban por lanzarse boca abajo en el suelo y pedir la misericordia de Jehová,
Su gracia es un asunto de su soberanía, y Él sonríe mientras nos ve tratando tan arduamente de agradarle, cuando nos ve luchando por hacer mucho por él. Y tan a menudo decimos que lo hacemos porque lo amamos, sin embargo, en el fondo de nuestra mente estamos frecuentemente, aun sin darnos cuenta, tratando de ganar puntos, de merecernos nuestro ascenso hacia arriba. Cuan despreciable insensatez, pues mientras nos empeñamos en construir una casa para él, estamos frecuentemente, aun inconscientemente instalando ladrillos defectuosos en la misma, y aun si nuestra fundación fuera o no la roca de la salvación, el Cordero de sacrificio, cada capa que construimos esta simplemente llena de agujeros, y el colapso inminente se avecina, aun mientras desplegamos con orgullo la grandeza de aquel para quien construimos, sin mirar a nuestros verdaderos motivos.
Jesús nunca esperó que fuésemos como él, todo lo que pidió es que seamos fieles a su palabra,
Una vez nos dijo que haríamos mas grandes cosas que las que Él hizo, y tratamos de construir un castillo para él, excepto que lo construimos en la arena. Todo lo que Él espera de nosotros es que mantengamos su nombre en nuestro corazón y nuestra mente y nuestros labios; eso es todo lo que realmente nos ha pedido.
En todos los casos Él escogió a cada uno de sus discípulos diciéndoles "sígueme", Él inclusive nos dijo "Estén en mí como yo estoy en ustedes", lo cual no se traduce "hazte igual a mi"
Sé perfectamente que no puedo ser Jesús, esto sería inverosímil, se que ni siquiera podría pretender ser una buena imitación, no mientras estoy en esta carne de corrupción, la cual continua siendo pecadora aun mientras yo la golpeo, la castigo y la obligo a someterse todos los días al conocimiento de Jesús.
Todo lo que espero poder ser es sólo un buen discípulo.
¿Tú quieres tratar de llenar el calzado de Jesús? Solo da gracia, como él te dio gracia!
Rev. José A. Luna
Siervo de Cristo Jesús
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